In Cartagena de Indias, Colombia

Ya estoy de nuevo en el blog, esta vez desde Cartagena de Indias en Colombia, la primera parada de nuestro nuevo viaje, esta vez de ruta por el Caribe colombiano.

Cartagena es una ciudad encantadora, llena de casitas coloniales de vivos colores con balcones de madera muchos ellos llenos de plantas y flores. La ciudad esta emmurallada, y entre las casas coloniales, las murallas y los cañones da cierta sensación de entre película de piratas y ciudad del sur de España. La verdad es que el centro es de postal, ahora sí, en un día lo tienes más que visto (es en lo que invertimos nuestro primer día aquí), ya que es relativamente pequeña y todo está bastante cerca. Nosotros tenemos el hotel (San Roque) en el céntrico barrio de Getsemaní, que viene a ser el barrio de los mochileros y posadas económicas, aunque la verdad es que después de Vietnam todo nos parece caro :-). La esencia de la ciudad es muy caribeña, con mulatos y mulatos colones/as y tripones/as del estilo "me estás estresando" (los tíos bastante macheteros por cierto), y con un aire a canción de Pitbull (ya tu sabes, mi amol, dale, no hay masná...)

Hoy lo hemos pasado paseando por el barrio de Bocagrande, que viene a ser el skyline de la ciudad. Bocagrande está lleno de rascacielos con apartamentos tipo Miami y es la zona "pija". Hemos pasado el dia en una búsqueda infructuosa de una playa donde estirarnos tranquilamente. La verdad es que las playas de Cartagena son bastante feas, con arena gris-marrón y llena de vendedores ambulantes colombianos pesados a morir intentando venderte cualquier cosa... eso sí, unas ostritas frescas sí les he comprado, aunque he tenido que regatear algo :-). Para comer he probado el plato típico que se llama "bandeja paisá" alias el amigo del colesterol (panceta, chorizo, frijoles, huevo frito, arroz, aguacate y tortas)... todo light, vaya. Cris (más lista) se ha comido un pescadito.


Por la tarde hemos visitado la fortaleza de San Felipe, inexpugnada pese a los ataques piratas de hace un par de siglos. Sin Francis Drake sí consiguió arrasar la ciudad ya que llegó antes de que las murallas y el castillo estuvieran construidos (ala, algo de historia gratis, by lonely planet).

Para mañana hemos cogido un tour de un par de días por el PN de Islas del Rosario, en una especie de resort perdido en una islita, ya os contaremos qué nos encontramos... ah! y esta noche nos toca salir de marcha, nos han dicho que en el Café de la Habana hay bastante...
  
salut
Xavi y Cris




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